Reo decapitador queda listo pa’ la cana: se le cayó el show de “loco” y va por homicidio calificado

¡Cuento de terror en la cárcel penquista! El interno Diego Valdés San Martín, que el 9 de diciembre de 2024 dejó la escoba en el módulo 42 del penal Biobío, se va derechito a juicio por homicidio calificado.
Ese día, un gendarme abrió la celda 21 y se topó con la escena más brígida del año: Vincent González Aguirre, su compañero de pieza, estaba ahorcado y decapitado con una lata. El propio Valdés contó que la macabra jugada era un “ritual satánico”.
Al toque, su defensa trató de zafar con la carta de la enajenación mental, pero la Fiscalía le echó tierra a esa volada. Después de meses de peritajes, el fiscal Paolo Muñoz dijo que el tipo estaba clarito y que todo fue planeado.
El abogado Andrés Durán, que representa a la mamá de la víctima, fue tajante: “No está loco, tenía todo fríamente calculado”, recalcó, pidiendo también que Gendarmería se haga cargo por la negligencia de tener a dos reos juntos con ese prontuario.
La audiencia de formalización quedó lista para el 13 de noviembre en el Juzgado de Garantía de Concepción. Ahora el “decapitador de Bío Bío” se enfrenta a una pena que lo podría dejar encerrado por décadas, sin chance de escudarse en la demencia.