Hijo baleado por su propia madre no resistió y murió

El caso que dejó a todo Chiguayante con la piel de gallina sumó un nuevo y triste capítulo.
El hijo de 35 años que había quedado en riesgo vital tras recibir un balazo en un presunto parricidio, finalmente falleció en el Hospital Regional Guillermo Grant Benavente de Concepción.
La tragedia comenzó la noche del viernes 26 de septiembre, cuando una mujer de 64 años habría disparado contra sus propios retoños: su hija de 39, que murió en el lugar, y su hijo, que alcanzó a ser trasladado de urgencia.
El hombre había resistido hasta este domingo en cuidados intensivos, pero según explicó el director del recinto, Claudio Baeza, estaba “hemodinámicamente muy inestable, con altos requerimientos de drogas vasoactivas sin respuesta adecuada”. En simple: la pelea por su vida estaba más cuesta arriba que subida al cerro Caracol con resaca.
“A pesar del esfuerzo de nuestro equipo médico en la Unidad de Cuidados Intensivos, el paciente terminó falleciendo”, confirmó Baeza.
La presunta autora del horroroso hecho intentó arrancar en un vehículo Chery Tiggo 3, pero su fuga duró menos que helado al sol: Carabineros la pilló en la comuna de Coihueco, Ñuble, con un revólver en el bolsillo y varias municiones sin percutar.
Según Fiscalía, la mujer incluso habría dejado notas anunciando lo que planeaba.
Ahora enfrentará a la justicia por doble parricidio consumado y porte ilegal de arma.
Mañana lunes será el primer round judicial: primero en Chillán y luego en Chiguayante, donde el caso promete tener para largo.