¿Cancha o potrero? Críticas llueven tras el duelo de Ñublense ante la U

El césped del estadio Nelson Oyarzún Arenas volvió a generar controversia luego del partido entre Ñublense y Universidad de Chile, donde el aspecto irregular y decolorado de la cancha quedó expuesto en televisión nacional.
Aunque los jugadores no cuestionaron su funcionalidad, el tema se tomó la discusión pública y puso presión sobre las autoridades municipales.
El alcalde de Chillán, Camilo Benavente, reconoció que el problema es de larga data. “Tenemos un problema estructural desde 2008. La capa vegetal es de solo 10 centímetros y cada verano enfrenta dificultades. Hay muchas especies vegetales distintas, con procesos naturales diferentes, y algunas sufren por falta de agua en ciertos meses. La cancha nunca ha tenido nota 7, tiene nota 5”, explicó el jefe comunal.
En 2023 se realizaron trabajos profundos en el terreno, lo que permitió tener mejores condiciones durante la temporada 2024.
Sin embargo, según Benavente, “en enero tuvimos un problema que afectó su desarrollo”. Pese a eso, asegura que “en términos de juego, la cancha no está en malas condiciones. El problema principal es visual, es el color”.
El municipio ya está en conversaciones con Ñublense para abordar una intervención mayor. “Estamos disponibles para mejorarla, pero eso implica cerrar el estadio por 10 meses. Es una decisión difícil porque afecta a la ciudad y al club. Estamos analizando la mejor estrategia”, afirmó Benavente.
La propuesta contempla una nueva cancha con una capa vegetal de 80 centímetros, y eventualmente una superficie híbrida que incorpore un 10% de fibras sintéticas.
“Eso no es incompatible con el proyecto, pero requiere una inversión de $750 millones. Podríamos estar disponibles si se logra una estrategia común con el club”, dijo el edil.
Mientras tanto, el entrenador Ronald Fuentes gestiona la visita de Patricio Bustamante, uno de los cancheros con más experiencia del país, para realizar una evaluación profesional del terreno.
El objetivo es tomar una decisión técnica y sustentable que permita a Ñublense contar con una cancha de estándar superior en 2026.